Aunque ha habido informes verificados de miles de cristianos asesinados sistemáticamente en todo el país de Nigeria durante los últimos años, el secretario de Estado Anthony Blinken ha decidido no reasignar el país de África occidental como un “país de particular preocupación”. En cambio, lo tratará como una nación sin violaciones graves de la libertad religiosa ni persecución religiosa.
La lista de este año publicada por el Departamento de Estado de EE. UU. Incluye a Birmania, la República Popular de China, Eritrea, Irán, la República Popular Democrática de Corea, Pakistán, Rusia, Arabia Saudita, Tayikistán y Turkmenistán como países de particular preocupación por haberse comprometido o tolerado “sistemáticamente, continuas y atroces violaciones de la libertad religiosa “.
Nigeria había estado en la lista de perseguidores extremos desde diciembre de 2020.
La Sociedad Internacional para las Libertades Civiles y el Estado de Derecho (Intersociety) en Anambra, Nigeria, publicó un informe el verano pasado que estimaba que unos 43.000 cristianos habían sido asesinados por extremistas islámicos nigerianos durante los últimos 12 años y que se habían atacado 17.500 iglesias.